martes, 4 de julio de 2017

Dios es bueno pt. 2

Como vimos la vez pasada, Dios es bueno, y es taaaaaan bueno que él quiere que a sus hijos y a su pueblo les vaya bien.

¿Pero hasta qué sentido?

Cuando pensamos en irnos bien generalmente nos enfocamos en un ámbito económico/laboral, pero la bondad de Dios va mucho más allá que eso.

Él quiere vernos bien tanto física como espiritualmente.
Alabamos a Dios no porque eso lo hace más grande o mejor, sino porque le hace bien a nuestra alma, nos da paz, nos da descanso; sobretodo en un mundo tan apurado como el actual en donde el estrés y la ansiedad reinan.
 

 
Nos se adapten al mundo, sino sean transformados por la renovación de la mente, para que comprueben cuál es la voluntad de Dios: Lo bueno, lo aceptable y lo perfecto.
Romanos 12:2


Lo que Dios hace es bueno, aceptable y perfecto. Puedes leer en Génesis 1 cuando Dios realiza la creación, varias veces al terminar de hacer algo el versículo termina con "y vio Dios que era bueno".

Nos da a entender que Dios después de haber hecho (por ejemplo) la luz lo sometió a una prueba de calidad para ver si era buena; Te puedo asegurar que si no hubiera sido lo suficientemente buena, Dios lo habría de deshecho y habría hecho algo mejor, porque esa es su naturaleza, hacer cosas buenas.


Y como iba saliendo al camino, vino uno corriendo y arrodillándose, le preguntaba: Maestro bueno, ¿qué he de hacer para heredar la vida eterna?
Y Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno es bueno, sino uno solo: Dios.
Mateo 10:17-18


Al ser Dios tan bueno, ¿tú crees que Él nos quiere ver tirados en una cama con intravenosa en medio de un hospital por causa de nuestra propia irresponsabilidad?
¿Tú crees que Él nos quiere ver enfermos por haber comido exceso de algo?



No voy a negar que Dios puede permitir algo "malo" para poder probarnos y/o enseñarnos algo, pero también hay veces en que quedamos mal porque metimos la pata a pesar de que nos aconsejaron no hacerlo.

Ya llevo más de un año trotando todas las semanas, al principio no lo hacía por mí, lo hacía por el Señor, yo sé que él quería verme bien y sano, y hacer algo de ejercicio es parte de eso.

En tiempo pasados no había máquinas automáticas que te hacían todo como ahora. ¿Quieres calentar la casa con la chimenea? anda al bosque, tala un árbol y corta leña, ¿Quieres lavar la ropa? pégate el pique al río con una canasta con ropa sucia. La gente hacía ejercicio de manera natural, e igual con la alimentación, no existían los doritos, cheetos, comida chatarra, snacks, galletas, etc. sólo frutas, verduras, carne y pan, y todo 100% orgánico.

Meses después de estar trotando había entendido porqué el Señor quería que hiciera ejercicio: porque me hace bien. Yo lo hacía por él, y él quería que lo hiciera por mí, al final lo hacía por mí, y me estaba amando al hacer esto.

También cambié mis hábitos alimenticios, comer menos pan, no tomar bebida gaseosa (con suerte 1 vez cada varios meses), leche para el desayuno, comer ensalada, etc.

Tarde o temprano llegará el momento en que lo único que habrá para comer será comida chatarra, y para ese momento me guardo jaja, de esa manera, cuando coma pueda disfrutar y dar gracias a Dios y no andar preocupado porque hace pocos días había comido más comida chatarra (eso va principalmente a las mujeres).

Espero que puedas cambiar tu manera de pensar a una que busque darle gloria a Dios tanto física como espiritualmente, Dios les bendiga.


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